DIA 5 - KUALA LUMPUR – SINGAPORE

Por la mañana estuvimos dando una vuelta rápida por los sitios que nos quedaban de KL. Estuvimos paseando por Chinatown, Jalan Petaling,  y  por Little India. Tuvimos ocasión de ver una boda hinduista en un templo y de ver un poco esas calles sin tanta gente. Estuvimos  en la plaza central o Dataran Mederka, viendo la estación de tren de KL y nos volvimos al hotel con intención de dirigirnos al aeropuerto. 

Una vez llegamos al aeropuerto, por 80 RM sin regatear con el taxista, nos dijeron que nuestro vuelo no salir de KL Internacional Airport, sino de la LCCT así que tuvimos que con coger un bus hacia allá. Menos mal que nos fuimos con 4 horas de antelación, porque  en estos países no hay que dar nada por sentado. La organización en general es deficiente y el tráfico puede ser imprevisible.

Una vez en el caótico aeropuerto cogimos el avión destino a Singapur, de nuevo el mundo civilizado.

La llegada a Singapore sin problemas. Para ir al hotel, lo mejor es utilizar el metro ya que el aeropuerto también está alejado. Por dos dólares de Singapur, SGD, te plantas en el hotel. El cambio es el siguiente: 1 SGD = 0.60€. El hotel Robertson Quay está realmente bien ubicado, pero la habitación aunque tiene muy buenas vistas es pequeña y algo cutre para el precio. Nos fuimos a cenar justo debajo del hotel, a un restaurante italiano que tenía oferta e invitaba a las chicas a una pizza o a la pasta, así que sin pensarlo dos veces. El dueño era un italiano divorciado muy enrollado. El tío hablaba español bastante bien y llevaba una vidorra bastante buena. En Singapore es otro estilo, las chicas van super arregladas y monas, cosa que en KL no ocurría al ser un país musulmán. Nos dimos una vuelta por el Clark Quay, lugar plagado de pubs y bares de copas, con mogollón de ambiente. Por lo visto es la zona preferida en Singapore para los expatriados. Esto lo tenemos a 2 minutos andando desde el hotel. Bueno nos vamos a dormir que ha sido un día largo.